4.- EL MATRIMONIO
Ángela y Reynaldo no se conocían como pareja, personalmente concluyo que no era el momento más oportuno para que dos menores de edad iniciaran el compromiso de vida marital, pero por las circunstancias presentadas sintieron que era la ùnica alternativa empezar a tenerla, quizá tuvieron algunos minutos para soñar còmo serían sus días futuros o quizá actuaron tan rápidamente que lo que hacían era justo lo que iba pasando por sus mentes en ese momento… visitaron la iglesia más cercana, le contaron al sacerdote lo que les pasó y éste aceptó casarlos, me hubiera encantado saber en qué pensaba el sacerdote cuando decidió que casarlos era la mejor alternativa; llevaban dos argollas para la ocasión y fueron bendecidas con esperanza, como si tal acto garantizara que los matrimonios fueran exitosos. Ya casados empezaron a amueblar su casa, las alacenas eran rejas de madera, las sillas, troncos de palma de coco y la cama un petate, obviamente sin estufa ni nada eléctrico.....